Reseña: Sinsajo - Suzanne Collins

¡Buen viernes, terrestres! Hoy les traigo la parte final de la trilogía de Los Juegos del Hambre. ¡Disfruten!

Ficha del libro:

Título: Sinsajo (título original: Mockingjay)
Autor: Suzanne Collins
Editorial: Scholastic
Fecha de publicación: 24/8/2010
Género: distopía
Páginas: 458

Sinopsis:

Katniss Everdeen ha sobrevivido dos veces a Los Juegos del Hambre, pero no está a salvo. La revolución se extiende y, al parecer, todos han tenido algo que ver en el meticuloso plan, todos excepto Katniss. Aún así, su papel en la batalla final es el más importante de todos. Katniss debe convertirse en el Sinsajo, en el símbolo de la rebelión... a cualquier precio. ¡Que empiecen los septuagésimo sextos Juegos del Hambre!

    ¡La parte final! Es la más brutal de las tres. Con la cual más sufrí, y sin embargo, a la que más vuelvo para leer.Tiene escenas muy duras que pueden resultar escalofriantes.

    La historia tiene más madurez y complejidad que las demás. También es más realista. Panem pasó de ver los Juegos del Hambre por televisión a jugarlo en la vida real, porque la rebelión estalló, y con mucha fuerza. A medida que transcurre el libro, aumenta la velocidad y el frenesí con que pasan las cosas. El desarrollo es dinámico y los personajes se vuelven contundentes, definidos. Evolucionaron en mayor o menor medida. Se  convierten en personas que conocemos mediante sentimientos, intenciones o ideologías.

    Más que en sus precuelas, tiene relevancia la política. Cómo manejan ambos ambos sus líderes y los seguidores que tiene cada uno. La guerra, la brutalidad de ésta, y las consecuencias que hacen que varios rebeldes mueran en el proceso.

    Es evidente el deterioro mental y emocional que sufre Katniss a lo largo de la novela. Se vuelve cada vez más inestable por las experiencias negativas que sufre, mostrándolo en sus pesadillas y convicciones. Se siente su impotencia ante las situaciones en las que se encuentra, ante las acciones que tiene que protagonizar por su rol activo en la revolución, esforzándose casi sobrehumanamente para demostrarles a todos que es apta y capaz, y que sus traumas no son obstáculo para cumplir el objetivo de derrotar a Snow.

    Me pareció raro ver a los personajes ya no en la arena, sino que en el mundo real. Pero la verdad, es que siguen allí. Nunca salieron. Panem se convirtió en la nueva arena, pero mucho peor que las anteriores. El lector se enfrenta a la vida de la población de los distritos, y a la rebelión que llevan a cabo tras soportar durante mucho tiempo ser tratado como esclavos.

    Se extraña al Peeta de los libros anteriores. O a Peeta en general, ya que no aparece todo lo deseado. Y cuando lo hace, no es el mismo. Se convierte en un peligro para todos, no solo para Katniss, por su comportamiento errático y perturbador, debido a como fue tratado por el Capitolio desde el fin de En llamas, donde se dice que lo capturaron en la arena. Pero lo que creo yo es que le faltaba algo así, algo realmente fuerte, para superarse y no sé si "madurar", pero trascender. Pensar de otra manera. Y también Katniss lo necesitaba. No es novedad que está enamorada de él, aunque tal vez ella no lo sepa realmente, y se agarra también de lo que le pasa a Peeta para afrontar la revolución.
    Todo lo bien que me caía Gale, se terminó. Tiene sus momentos buenos, pero Collins lo dotó de demasiado sentimiento destructivo, y pareció hasta egoísta.
    Finnick me encantaba, y bueno, perdón por el spoiler, pero me destruyó su muerte. Lo peor de esto fue cómo lo escribió la autora. Básicamente, en un renglón. Ya está. Nada más. Era un personaje importante, y si bien en realidad no quería que muriera, me pareció que merecía algo más. No es solo una cara bonita, y sufrió también. Y cuenta cosas claves de Snow, cómo llegó al poder, y porqué lleva encima una rosa siempre. Parece banal, pero no.

    Me pareció demasiado para un libro solo. Es decir, creo que como trilogía estuvo bien, pero le hizo falta al menos una buena cantidad de páginas. Siento que apuró demasiado las cosas y sobrecargó la trama de la mitad en adelante. Todo pasó a gran velocidad, sin dar tiempo a un descanso o a entender bien lo que pasaba. No te daba tiempo a reaccionar, porque cuando terminabas de asimilar algo, pasaba algo más contundente. Igualmente, es un muy buen libro, un muy buen cierre para la trilogía. Altamente recomendable.